Hay contenedores de gas en condiciones precarias, con mangueras viejas y manipulaciones incorrectas, verificó Página Siete en un recorrido por zonas comerciales.
En puestos de comida de zonas comerciales de La Paz se manipulan garrafas de gas sin las medidas de seguridad necesarias. La Intendente Municipal asegura que semanalmente se realizan operativos de control sobre manipulación de alimentos y seguridad de implementos; las vivanderas, no obstante, afirman que las inspecciones ediles son escasas.
Avenida Buenos Aires: después del túnel que forman los toldos de la calle Uyustus, hay tiendas de ropa, galerías de productos electrónicos y, entre ese mar de comercio, tres chicharronerías. Con gorro en el pelo y mandil, tres señoritas ofrecen a potenciales clientes trozos de carne de chancho recién tostada: “Pase al fondo, caserito”.
El puesto está repleto de mesas y asientos. A un costado, hay una cocina industrial con cubierta de lata y encima de ella, un sartén enorme donde se fríe la carne. Al lado se encuentran dos garrafas, una encima de otra, ambas conectadas: una a la cocina del perol y la otra, a un anafe donde, en una olla, se cocina el fricasé que también venden. En el puesto aledaño, se puede ver que una garrafa está encima de un bañador de plástico.
La situación es similar en otros puestos del sector: garrafas en condición precaria o de riesgo, mangueras viejas y cocinas demasiado cerca a los comensales, según pudo verificar Página Siete en un recorrido desde la calle Calatayud hasta la Murillo.
Las vivanderas consultadas aseguraron que desconocían cualquier capacitación reciente sobre manipulación de garrafas y cocinas. Tampoco sabían de controles realizados últimamente por la Intendencia Municipal. “Los de la Alcaldía, ¿acaso tenían que venir? Ellos para nada vienen por aquí”, dice una vendedora de la calle Melchor Jiménez.
El 10 de febrero, en la Entrada del Carnaval de Oruro, una explosión en un carro de chicharrones dejó ocho muertos. En primera instancia, se pensó que la detonación fue provocada por la mala manipulación de una garrafa. Tras una segunda explosión –el martes– la Policía eliminó esa hipótesis por la presencia de anfo (un potenciador de dinamita) en el lugar de los hechos.
“Con lo ocurrido en Oruro, mis caseritos tenían miedo venir por la garrafa”, indica una de las comideras que tiene su puesto en la Uyustus. Cuenta que cuando se supo que no fue una garrafa la causa, sus clientes volvieron.
Intendente: Hay control
Un requisito para el funcionamiento de los puestos de comida callejera es que sus propietarios tengan el Carnet de Manipulación de Alimentos. Para obtener esa licencia, las vendedoras deben pasar un taller de capacitación de manipulación de alimentos e implementos de cocina; además de medidas de seguridad. “En ese curso obligatorio, reciben recomendaciones en diferentes temas como en el cambio de mangueras y la utilización de reguladores de gas” explica la Intendente Municipal de La Paz, Velma Vargas.
La autoridad edil asegura que es rutinario el control a los negocios de expendio de comida: ya sean restaurantes o puestos fijos o ambulantes. “La Intendencia controla que la indumentaria, las condiciones de las garrafas, de la manguera y de los chicotillos sean los adecuados”.
Vargas recalca que pese a la capacitación, algunas vivanderas mantienen algunas prácticas de alto riesgo. “La vieja y mala costumbre de aprovechar hasta la última gota de gas prendiendo una vela debajo de la garrafa o poniendo allí un recipiente con agua caliente son peligrosas. Es alto el riesgo de accidente”.
En los dos primeros meses del año, la Intendencia ha emitido 3.000 carnés a comideras, después de su capacitación.
“Es obligación de las vivanderas saber que para vender comida tienen que tener este documento. Es cierto que es obligación nuestra hacer los controles, estoy segura que esas señoras que dicen que no los hacemos tienen por lo menos una notificación de que deben regularizar su situación”, afirma Vargas.
Tips para un uso seguro de garrafas
Estos son algunos de los consejos que la Intendencia Municipal La Paz imparte a los vendedores de comida en sus talleres de capacitación. Estos cursos son requisito para obtener la autorización de expendio de alimentos:
– Nunca, por ningún motivo, prender velas cerca a la garrafa. Esa o cualquier práctica similar es de alto riesgo y puede causar una explosión.
– Verificar el buen estado de la manguera; no puede estar reseca, resquebrajada o con agujeros. Debe cambiarse para estar intacta.
– Controlar que las abrazaderas de la manguera estén en buenas condiciones. Es decir, que no estén cortadas ni encerradas para que cumplan el objetivo de conectar de manera correcta la garrafa con la cocina.
– Utilizar el regulador de la garrafa. Es útil para que no se desperdicie el gas cuando la cocina esté encendida.
Fuente: Página Siete