La mujer está internada con heridas causadas por un cuchillo, una vez recuperada la llamarán para declarar ante la Fiscalía.
Una madre de 38 años fue aprehendida por quitar la vida a sus dos hijas de uno y tres años, el martes por la noche. Según la Policía, primero hizo ingerir a sus niñas un tóxico y luego utilizó una prenda de vestir para asfixiarlas.
“Está aprehendida y se espera su declaración para continuar con el proceso de infanticidio”, informó el subdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Fernando Rojas. La autopsia dio cuenta de que las niñas fueron intoxicadas, en un principio, pero la causa de la muerte fue asfixia por sofocamiento. El uniformado dijo que para cometer este hecho se utilizó una prenda de una de las niñas. “Ella utilizó un elemento blando, una tela, una prenda de vestir. Ésta es una de las evidencias que se recolectó en el lugar de los hechos”, reportó.
El martes por la noche, la Policía llegó a la zona Escobar Uría de la ladera este de la ciudad. La mujer de 38 años quitó la vida a sus dos hijas, luego de cometer este hecho intentó quitarse la vida con un cuchillo ya que la encontraron con múltiples heridas punzocortantes.
Fue hospitalizada en un centro de salud y ya se encontraría estable pero con un custodio policial. En las próximas horas deberá presentar su declaración informativa ante el fiscal asignado. La Policía presume que la madre tomó esa decisión por los problemas económicos que tendría la familia y la inestabilidad emocional con su pareja porque encontraron cartas que supuestamente habría escrito la mujer para dejar un mensaje en caso de que falleciera.
En las próximas horas, el Ministerio Público tomará la declaración informativa al padre de las niñas, también convocarán al entorno familiar de las menores. “Estamos esperando recabar información, vamos a citar al papá (hoy) y otras personas como la familia, para que presten su delación informativa, ya que ella estaba sola con las dos menores”, declaró ayer por la tarde el jefe policial de la FELCC, Fernando Rojas.
Fuente: Página Siete