Un estudiante universitario de 38 años se voló la cabeza con dinamita por el amor de una muchacha. El suicidio se registró el domingo pasado en el municipio de Llallagua, al norte del departamento de Potosí.
La detonación de una dinamita alertó a los lugareños que luego se enteraron de boca en boca que un estudiante había tomado la extrema decisión de acabar con su vida. Inmediatamente los ciudadanos se juntaron al rededor del cadáver y dieron parte a la Policía de lo sucedido.
El cuerpo del suicida estaba sin cabeza y a diez metros del lugar estaba esparcido el cuero cabelludo y la masa encefálica.
Se presume que el estudiante atravesaba un momento de depresión porque supuestamente su pareja sentimental habría decido terminar con la relación. Además, no se descarta que haya estado bajo influencia alcohólica.
Aunque otras fuentes señalan que el ‘amor de su vida’ se embarazó para su jefe, que era casado y tenía hijos.
Personal de la División Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Llallagua se constituyó en el lugar y procedió con el levantamiento legal del cadáver. Trabajo que se extendió por más de una hora, debido a que la cabeza voló en pedazos y quedó esparcido diez metros a la redonda.
El comandante departamental de la Policía, Vladimir Quiroz, informó que el suicidio ocurrió el domingo a las 11.40 en el campamento Salvadora de Siglo XX.
El cuerpo aún estaba tibio cuando fue recogido por los agentes de la Policía, pero sin cabeza. “En el lugar se encontró masa encefálica muscular, huesos, cuero cabelludo multifragmentada a diez metros a la redonda”, se lee en el informe preliminar de los investigadores de la Felcc. Quiroz mencionó que se está tomando declaraciones a los familiares del occiso para conocer con certeza las causas del suicidio que estremeció al centro minero de Llallagua.
Los primeros en llegar al lugar del hecho fueron las familias que viven en el campamento Salvadora, quienes aseguran estar alarmados y preocupados, ya que temen que se vuelvan a registrar ese tipo de suicidios.
Muchos sugieren que el uso de la dinamita sea más controlado.
Al momento se desconoce de dónde sacó la dinamita el estudiante universitario.